“Mirar al alma del niño” es ir más allá del síntoma y ver qué hay detrás: ¿Para quién es ese comportamiento? ¿A quién está dirigido ese amor o ese rechazo?

Como adultos podemos dar lugar a lo excluido y reconocer lo que fue ignorado. Solo así es cuando se abre el camino hacia la vida y podemos acoger nuestras heridas de la infancia, cuando los niños se empiezan a liberar de sus dificultades.

Desde la mirada sistémica, comprendemos que cada niño está unido a sus padres y a una historia familiar. Los vínculos con los antepasados, las pérdidas no reconocidas, las muertes silenciosas y las exclusiones no miradas se manifiestan en la vida del niño de hoy.

Cuando este enfoque se integra, ocurre una transformación profunda: el dolor se convierte en fuerza, la dificultad en la comprensión, y tanto el niño como el adulto pueden reconciliarse consigo mismos, con su familia y con la vida.

A veces los niños llevan en su corazón emociones, miedos o silencios de generaciones anteriores, intentando, sin saberlo, traer equilibrio y amor donde antes hubo dolor.

Desde la mirada de las constelaciones familiares, nos invita a reconocer cómo esas lealtades invisibles pueden manifestarse en el cuerpo, emociones o conductas de los hijos. Cuando los adultos podemos mirar e integrar lo que quedó pendiente en nuestra historia, los niños pueden empezar  liberarse también.  

Las constelaciones familiares, basadas en la filosofía de Bert Hellinger, son un camino para comprender los vínculos profundos que nos unen a nuestra familia. En este grupo abriremos un espacio de comprensión y práctica para explorar cómo nuestras experiencias de infancia nos influyen en nuestras vidas y la de  nuestros hijos.

Un encuentro para reconectar con nuestras raíces, mirar con amor hacia atrás y abrir paso a una nueva forma de estar presentes.

Sanamos mirando atrás con ternura, para que nuestros hijos y nosotros podamos mirar hacia adelante con más libertad.

Las constelaciones familiares son una herramienta terapéutica que nos permite comprender los vínculos y dinámicas invisibles que heredamos de nuestro sistema familiar. Nos invitan a reconocer el orden y la fuerza que habitan en nuestro sistema familiar.

Que conseguirás :
– Ver con claridad lo que no entiendes
– Sanar heridas profundas
– Cortar patrones familiares repetitivos
– Liberarte a ti y a tus hijos de cargas heredadas
– Recuperar fuerza para tomar decisiones importantes

Para personas que sienten que es hora de un cambio profundo.
No necesitas experiencia previa, solo apertura y disposición.